Son las coartadas de este momento,
con curiosas epistolas que llenan al alma,
coge distancia y se llena como el pozo de un baño,
sin darse cuenta revienta y se vuelve a llenar.
Pasos son los dardos que das con esa actitud,
poco fingible,
poco entendible,
me lleno del alma fria y oscura,
y remedo al contraste para no herirte.
Cojo el don de la mentira,
y con muchas pautas,
comienzo el concierto de lo profano.
Te olvido un rato,
y pienso cuando acaba este acto,
doy fin a la actuación fuera de tu presencia,
y con uno, dos, tres gotas,
desangro, con ira a tus ojos y a tu actitud.
La palabra odio,
se retuerce en mis venas y arterias,
y no me canso de odiarte,
queriendo dar fin a esta historia.
Si tan solo serias como me recibes al verme,
no estaria asi
Te odio