Amores que se pasman en nuestra vida cotidiana
y se hacen inmunes al olvido,
fantaseando en un idilio ya perdido,
pensando que se acercarán a nuestras manos.
Esas heridas que se quedan,
para siempre abiertas,
son vestigios de pasiones que desmiden corazònes,
y transforman para siempre nuestras vidas,
cerrando las puertas a nuestro mundo,
por quedarse dormidas o despiertas.
deliberando dolencias que se aferán noche y dìa,
para recordar constantemente lo bello de aquel amor,
sin pensar en lo distantemente que este tu estrella,
conmoviéndonos como nunca cada día.
Amores como tú, amores viejos,
amores intranquilos e imborrables,
que se quedan en nuestro corazòn para ser inolvidables,
aunque puede que del alma estén tan lejos como el universo