Estaba la luna dormida
con un reflejo de amor,
cuando llegaste tú.
Llevabas capa y sombrero,
yo un pañuelo en la cintura
sin bordados ni "te quieros"
Tu capa rozó mi vestido,
!y los cariños volaron al viento!
susúrrame,me decías al oido,
que nunca has querido así,
!como yo te estoy queriendo!.
De la mano de una tierna locura,
vinieron los duendes traviesos,
los luceros más bellos,
las hadas y las princesas,
las estrellas bajaron del cielo,
!hasta la luna bailaba boleros!,
las flores enamoradas, al vernos,
perfumaron nuestros besos
Y fue como un dulce cuento...
nuestra pasión hecha deseo.