Tu aliento me envenena,
me embriaga, me abraza,
me quema.
Ardiente como un volcán
es tu aliento en mi boca,
que echa lava de fuego
cuando tu beso brota.
Tu aliento es como un soplo,
que da áire a mi vida;
susurrando al oído
tantas cosas prohibidas.
¡Dame siempre tu aliento!
Que me llene la vida
de un sentimiento puro
que es amor y alegría.
¡Qué no me falte nunca!
que me siento vacía,
si no siento tu aliento
al quedarme dormida.
Tu aliento con el mío
se mezclaron los dos,
en un beso profundo
que nos dimos, tú y, yo.
Salió de nuestra alma
y nuestro corazón;
ese profundo beso,
que es un beso de amor.