Hombre que me deseas,
que me buscas desesperado,
que hueles a perfumes erotizados,
no te haz dado cuenta,
que de tanto desearme,
me haz hecho invisible,
y solo a tu cuerpo pertenesco,
te apoderaste de mi,
en tu imágen puede verse,
tu boca que me provoca,
a deliberado que sea tuya,
en tus manos temblorosas,
mi piel se derrite entre tus dedos,
y tu dulce fuego se enciende,
con el combustible de mi cuerpo,
y tu carne poderosa y salvaje,
introduces en mis aguas ardientes,
con tus arómas y mis fluidos,
te agitas fuertemente,
hasta comprender que tu masculinidad,
esta llenando todos mis poros,
y que tu boca provocadora,
es una tormenta de verano,
en la sequedad de mis pensamientos,
y el manantial de tus deseos.
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!