Desde el vientre de mi madre,
Me formaste con un propósito
Descubrir tu amor eterno padre,
Y publicar tus maravillas Dios bendito.
Trabajaste con mi plano,
Arquitecto de mi alegría
Me transformaste con tu mano,
Y vivir sin ti ya no sabría.
Hoy tengo una razón,
Para alabar tú nombre
Has sensibilizado mi corazón,
Y has hecho de mí un nuevo hombre.
Como el alfarero eres conocido,
Porque al hombre con tus manos fundas
Tomas a un corazón herido,
Y del tierno amor lo inundas.
Ángel R. Anaya Puerta
Todos los derechos reservados a su autor
Código de registro 92022841316
Me trasformaste con tu mano arquitecto de mi alegria. Hermosa poesía ANGEL excelentes versos muy bien amigo