¡Ah! incansable aventurero
Con su capa viajera no tarda en volver;
por renacer suspira, vuela sin descanso
queriendo entregarse
sin importale cómo ni cuándo.
Amor de muchas plumas y muchos trajes,
no mide tiempos no sopesa favores,
se aventura por espacios de vida
calmándolos de dones exquisitos.
Esperanza y abrigo irradia,
remonta cumbres, desciende cañadas,
desentraña escondrijos.
Con su pregòn de terciopelo
llama a los sordos, deslumbre ciegos,
convoca a los cojos, enternece
a los de pantalla por cabeza
y alcancía por corazón.
¡Es Él! Deteniendo siestas, lanzando
clamores, creando melodías ...
Donde los sueños crecen y recrean
¡La inmensurable vida!