Madre,.... aunque en mis venas
recorre el perfume de tu triste partida,
y entre mis sutiles manos, las penas
que fueron caricias durante tu Vida.
Madre,... aunque la espina
de verte a lo lejos, solo en mis sueños,
desborde penoso como flecha acecina
para derribar las alegrías de mi ensueño.
Madre,... aunque no escape de la pesadilla
que arruma mis latidos de mi dolido corazón,
para sentenciarme sufrir en tu día
que juntos pasábamos entre abrazos e ilusión.
Madre,... aunque en el fondo mi mas precioso anhelo
es verte junto a mí en tu día de Alejandría,
Madre,... de Mi hasta el Cielo
va dedicado mi afectuosa Poesía.