Caí en las garras de su amor,
Fui una víctima más de sus encantos,
Me dejó llorando en pleno albor,
Del día que me llenó de quebrantos.
Sus labios fueron cómplices de mi mal,
Sus ojos artífices de los pecados,
Que han convertido su belleza fatal,
Para todos los estúpidos enamorados.
Ella es la causante de mis ilusiones,
Que no sirven absolutamente de nada,
Ella es toda una rompecorazones,
Con el solo poder de su mirada.
Todavía al pasar lo sigue haciendo,
La rompecorazones bajo la luna,
De deseo por ella me estoy perdiendo,
En estas noches trazando su figura.