Noche de mayo,
Recuerdos de octubre
Y tantas las veces que mi amor gitano
Muy dentro de tus brazos te adoraba con fervor.
Ibas donde yo quería me siguieras tú
Y reias coqueta, encendias tus caricias
Y tu naturaleza divina era mia hasta el fin
Como querias, habia fuego en tu entrega
Tu inocencia del dia se entregaba con el alma
Y la fuerza de tu cariño para mi solo era.
Para mi solo era, en los minutos eternos donde tu eras estrella y yo tu cielo azul.
Dame un beso, tan solo uno , de aquel millon de besos, que yo te diera en los tiempos de nuestro hermoso amor.
Eran tantas las alegrias, la felicidad del paraiso y tu a mi lado, como una donacion del cielo que alumbraba mi vida con tu ardor y pasión