El dolor atraviesa como espada
y la garganta se aprieta como un puño,
es un grito contenido que ahora exhalo.
Un recuerdo con llanto tantos años!
que vacía está la casa
y la mesa que ocupabas por las tardes,
cuando el sol de lleno te pegaba.
Yo no quise ver tu decadencia,
tú que eras de las dignas, la más digna,
la traviesa, la "mala" te llamaban,
por lo brava, lo activa y altanera,
con tu porte de reina, en tu hermosura.
La primera al sol de la mañana,
un ovillo de angora embelezado.
Hoy llueve y se mezclan
con mis lágrimas la lluvia,
con el sol que al irte te llevaste!
Que dolor mi mascota tan amada
y que hondo el vacío que dejaste