La justicia ciega

Con la justa dosis de ironía 

un toque sutil de sarcasmo

y algún pellizco tal vez 

de un matiz algo mordaz,

critico, de manera singular,

porque la razón me ampara

esta situación actual

en que hierve un mal estar

que al mas paciente enerva.

Los que defienden las leyes

en pro de sus intereses

sin preocuparles un ápice

lo que el ciudadano opine

actúan a su albedrio

mangonean a su antojo

y se ponen por montera

toda una nación entera.

Pelean durante años 

por conseguir sus escaños

sin reparar en los daños.

Una vez lo han conseguido

se aferran bien a los tronos

sin intención de soltarlos

mientras que llenan sus arcas

con los fondos del erario 

y los derechos de todos.

Cambian las legislaturas

recortan los presupuestos

y aprietan los cinturones

de los currantes honrados

que cuentan horrorizados

en sus platos los garbanzos

temiendo que a fin de mes

puedan afrontar sus pagos.

El que mas tiene mas roba

y los juicios se demoran,

cuando llega el momento

a prescrito su delito,

no devuelve un centimito,

y si acaso a entrar llega 

en el palacio las rejas

allí come, bebe y duerme

con cargo a los impuestos

que salen de los salarios.

Y si echamos un vistazo

se ha reducido la pena

sin la multa haber pagado. 

Algunos hay que no entienden

la causa que les imputan,

otros a todo eran ajenos

pues de nada se enteraban

y sus bolsas engordaban.

Mangar resulta rentable

contra mas alto el estatus,

pero al que vive en la calle

que le pillen confesado,

si descubren que ha robado.

por ser pobre delincuente,

de oficio el abogado

y a cumplir con la condena

aunque hayan pasado los años.

MG 11-06-2017