Me enseñaste a quererte,
me enseñaste a amarte,
no necesito saber olvidarte,
pues nunca he de perderte.
No puedo verte sufrir,
a tu lado siempre he de vivir,
incluso prefiero morir,
si tu a mi lado no quieres dormir.
Nunca una lágrima por mi derramarás,
jamás por mi culpa sufrirás,
sólo palabras de amor de mi escucharás,
porque se que tu siempre me amarás.
Siempre en este corazón permaneces,
aún cuando cierro los ojos en mi existes,
tatuada a mi piel te estableces,
no puedo ser mas dichoso porque a mi lado tu estés.
Soy el más afortunado por ser correspondido,
con este gran amor que hemos construido,
que con tus labios y tus ojos has cautivado,
y este corazón tienes muy enamorado.