Ya no quiero conocer mi destino, ya no quiero saber si seré felíz, ya no quiero pensar en el porvenir, ya no quiero ignorar la realidad, ya no quiero seguir viviendo de mentiras, ya no quiero ni el tiempo regresar, ya no quiero escuchar"te amo", esa es mi triste realidad. Ustedes me enseñaron a decir la verdad, ustedes me enseñaron a pedir porfavor, ustedes me forjaron un futuro, ustedes prometieron estar conmigo siempre, ustedes no permtieron que hiciera travesuras, me brindaron consejos, me dieron cariño, me regalaron abrazos, me quisieron a besos. Ahora ya todo se olvidó, ya todo quedó atrás, ya todo se borró, solo me queda decir adiós, porque mi nombre se hundió con las palabras, porque mis caminos se volvieron torcidos, porque el engaño llenó mi vida, porque el absurdo alimentó mi mente, porque el destino claudicó al enterarse, porque mi vida se inundó de llanto, porque la verdad perdió su significado, porque el amor que me regalaron toda esta vida se esfumó como arena al viento, se materializó en un lamento, se quebró con un ¡ya no te quiero!. Ahora ya no queda nada de esa dulce mirada, de esa tierna voz, de ese mar de palabras sabias, ya no queda nada de este pobre corazón, ¡ya se fué!, ¡ya se fué!...hasta el perdón.