Le digo hola al día,
Hola a la noche,
Hola a todos mis temores que piensan atormentarme.
El hoy y mi tristeza saludan al vacio infinito,
Donde ya nada queda por decir, donde ya nada
pasara.
Pero ya ves mi brutal caída,
Ya vez que la tempestad golpea mi puerta de manera
abrupta,
Ya el cielo se tiño de tu color de cabello,
Y los labios se reflejan en las nubes divinas.
Ya ves mis culpas me rascan la espalda,
Las aventuras de mi conciencia sientan mal con tu
ser,
Siento que no soy nada.
Digo hola al viento y las cuerdas de la música que
me calma,
Siento y presiento que te alejas más de mí,
En cada día en cada hora, el barco se me va,
El rio me tapa y la noche me oscurece.
Seré yo que me lastimo ante la vida,
Seré yo quien piensa más allá de lo que puede,
No lo sé, ni creo entenderlo.
Te saludo a ti amor, las distancias nos separan,
La luna nos une en este momento.