Hoy un canto mudo me desgarra
a pesar que el dolor no lo siento,
por dentro y por fuera está la nada,
mi alma tiene el corte de mi parra
el que la ha separado del suelo.
Tú nos has dado uva y la sombra
que a nuestros veranos contuvieron
me has visto jugar, fumar y luego
me has visto ser la misma y ser otra
fuiste mi refresco y alimento.
Te he dejado en el corral muriendo,
abrazada al jazmín te despides,
tus ramas, tus hojas y tus vides
se secarán antes de este invierno.
Ya recuperarte no es posible.
No hay perdón por quitarte la vida.
Ahora que sin ti se verá el cielo
pensaré , cuando mire hacia arriba,
que esto ocurrió, por no haber hecho
en el momento, lo que debía.
Debí pedir ayuda, podarte
y no molestar a los vecinos,
trabajar la tierra y regarte
gozar de tu sombra y tus racimos
medir tu valor y preservarte.
Ahora que te pierdo he aprendido
otra lección del amor y de la vida
lo que se ha de hacer tiene su tiempo
si no lo haces en el , lo has perdido
y no sirve el arrepentimiento.