Mi acento es nativo, diferente a cada uno de vosotros
lo guardo en mi alma y sin sentir siente y me delata
me dice, os dice, que soy camino sin rumbo
que amo el amor y que por él vivo, o muero sin saberlo
que tengo un pasado, enterrado entre tierra, olvidado
y quisiera llorar, recordar, pero no sabría luchar
y allí entre trapos y cartones, renegado o quizá apartado
pienso en mi voz, la única que permanece a mi lado
a ella le debo lo que soy, lo que fui
lo que nunca llegaré a ser
y cuando se apague, cuando allá a lo lejos no exista luz
tan solo me quedará vivir entre el vacío
aséptico, frío, desnudo y pobre.