Estoy sentada aquí, tranquila, alegre, rozagante,
porque un día se que llegara la muerte despiadada,
la que de una sola entrada, llena toda una función,
pues arranca el corazón, con una fuerza imponente
y se lleva simplemente lo que ha sido un gran amor.
No es que sea cruel, es la única verdad,
que tenemos al nacer y es que nos viene a buscar,
más tarde o más temprano, a todos nos llegara.
Estoy sentada aquí, tranquila, alegre, rozagante,
porque se que ese día, cuando tenga que marcharme
estaré juntito a dios y de nuevo con mi padre.
Estoy sentada aquí…
LUZ MARINA MARTIN
17 DE MARZO DE 2006
Copyright ©
Derechos Reservados ®