LA POESÍA PERDIDA

Te escribí una gran poesía
pero se la llevo el viento.
Estaba llena de risas,
de ilusiones y recuerdos.
Te escribí en ella lo que sentía
lo más apreciado de mis adentros.
No me avergoncé de lo que te puse,
ni me avergoncé de ponerte aquello.
En esa gran poesía
reflejé mi alma entera,
escribiendo lo que quería,
escribiendo grandes versos.
A veces cuando recuerdo
la poesía ya perdida
se me hiela el pensamiento
recordando lo que ponía.
Es una pena que a tí
no pudo llegarte la poesía.
Puesto que no me atrevería
a contarte lo que decía.
Solo me atrevo a decirte
que en esa gran poesía
mis mejores pensamientos
aquella noche escribía.