Me cuesta asimilar.
Fueron años volviendo siempre
a la misma rutina…
Que aunque lo acepte o no, un:
Hoy no salgo igual que ayer,
no salgo igual que mañana.
Fueron años donde siempre
traté de alimentar un: no pasa nada.
Dejé mis decisiones en segundo plano.
¿Acaso comodidad? No, no, eso no!
Solamente para evitar discusiones.
Y ya vez!!!
Y ahora aunque no existan disputas,
es difícil de creer en algo nuevo.
Libre tú, libre yo… caminos separados,
unidos por un destino…
abriendo distintos senderos.
Años, donde dejé de hacer mis cosas,
por dedicarme a las de otros.
Y ya vez!!!
Ahora conquisto, queda lo aprendido!
No me siento arrepentida por nada.
No me asalta ni rencor ni miedo.
Me queda…
no volver a repetir lo mismo
y no dejar a que vuelva esa rutina.
Me queda…
vivir sin egoísmos hacia los demás,
sin olvidar que ahora tampoco puedo
ser egoísta conmigo misma!
No tendría ningún sentido
caer en el mismo automatismo.
No tendría ningún sentido
no cuidarme, abandonarme.
No tendría ningún sentido
mi vida nueva sin mirar lo sensible.
No tendría ningún sentido
seguir dilatando siempre lo mío.
No puedo dejar que mis ilusiones
sean mudadas siempre siempre
por los sueños de los demás…
No puedo dejar que mis momentos
sean aplazados para días después,
para días que nunca llegarán…
No puedo dejar que mis alegrías
se trunquen porque no es momento,
porque ahora no se puede…
No puedo dejar que mis tristezas
no puedan ser contenidas
solo porque haya alguien
que razone distinto a mí.
Y así cruzaron los años,
preocupada en lo que dirán.
Y ya vez…
Eso hoy no me importa!
Y ya vez…
El imposible no existe!
Existo yo!!!