Para que callarse,
es completamente inutil comer silencio, las cosas fluyen por su verso, todo fluye.... todo renace en el universo. No era preciso eternizarse, la luz llega nuevamente radiante,
desde un amanecer interminable,
que surge de las profundidades màs azul que antes.
El fuego arde ... con cispa y llamarada iluminando la cueva oscura y calentando la frialdad del alma.
La flor, se abre al sol del mediodia, el dolor se ha quedado sin motivo...lejos està la hipocresia, y aparece a paso apresurado la alegria... huespede intruso dulce y bienvenido
que al corazòn hincha de orgullo,
y el amor replandece a un claro y calido dìa.