Del absolutismo arcaico no me espigo,
es parte emocional de mi llanto,
cristalina gota cae cual amaranto.
Temo al agua, a pesar lo mendigo.
El animal del hombre sufre vértigo,
suspiros marcados recoge el viento,
sonido grave modula el sediento,
estruendosa alusión es del látigo.
Furtivo circo sobre orbe se monta,
la razón penada en corral se apronta,
asilo de materia esta en la sombra.
Los colmillos en recuerdos saborean,
los ojos sin ver justicia merodean.
Al paisaje negro eufemismo asombra.
Autor: Alcibíades Noceda Medina