Hoy sólo hablaré
en presencia de mi abogado,
no tengo nada que decir
ni ninguna intención
de decir nada,
no hay razón
para expresar mis sentimientos,
ni amor ni resentimiento,
me olvidé hasta de que tengo pensamiento,
pienso luego existo,
no pienso,luego,no existo,
no tengo nada que expresar
porque no tengo nada
que comunicar,
después de tantos años
tan sólo hay una palabra que los pueda resumir:
nada,
palabra que por sí sola tiene peso,
un peso que movió la balanza
aparentemente equilibrada
contra toda razón,
siendo generosa quizá le ponga
a nada dos signos
¿?
de interrogación.