Si un día,
por casualidades de la vida,
te la encuentras por la calle,
se acerca a ti,
y te dijere unas palabras,
dila que ya no pienso en ella,
que nada ya siento por ella,
que poco a poco,
la estoy olvidando.
Dila que me has visto contento y feliz,
que me has visto sonriendo,
como hace ¡ mucho!, ¡ mucho
tiempo antes nunca me vistes!;
dila que mi corazón,
poco a poco,
la esta olvidando,
y que poco a poco,
estoy olvidando todo el mal
que me hizo.
Dila que mis noches
ya no son tan largas y frías,
dila que otra me acompaña,
y que esa otra,
es ahora la dueña de mi corazón,
dila que ahora ella,
es la niña de mis ojos,
y la que con su amor y cariño,
me esta haciendo olvidar
todo el mal,
y todo el daño
que ella me hizo,
y hasta miéntela,
miéntela un poco si quieres,
pero no se te olvide darla las gracias,
por haberme hecho tanto daño,
y dila que la perdono,
porque el que no sufre no ama,
y el que no ama no aprende,
y nunca podrá saber lo que es el amor.
Fernando Pérez Rodríguez
Nunca habÃa leeido algo que me calara tan hondo el alma,escribes muy bello,además me identifico mucho con tu poema SIGE ASI!!!!!!!!!!!!!!!!!!