En tanto que tú luces altiva como un astro,
y al tiempo que me ignoras, displicente y coqueta,
yo por ti me desangro y en el barro me arrastro.
Soy bufón de tu fiesta. Para ti soy poeta.
Tal parece que tienes corazón de alabastro,
que cruzaras el cielo como un bello cometa,
porque sólo en las sombras se proyecta tu rastro
navegando sin guía, sin timón y sin meta.
Tu ignorancia me hiere, me trastorna, me espeta.
¿Es que no tienes alma? o tal vez, insensible,
nada sabes de penas, de dolor ni quebrantos.
Pero yo mientras tanto para ti soy poeta
que en silencio te espera con un sueño imposible
esparciendo en el viento de esperanza mis cantos.
Heriberto Bravo Bravo SS.CC