Hoy tuve la necesidad de platicar con la luna, le conté lo que siento por ti, lo sola que me siento cuando no te veo, lo triste que me siento cuando no te escucho, la falta que me haces cuando no estas conmigo.
También le confesé que a veces tengo miedo, miedo a quererte y no ser correspondida, miedo a buscarte y no encontrarte, miedo a decirte que te amo y escuchar que tu a mi no.
La luna me respondió: no siempre cuando se ama se es correspondido, cuando nos enamoramos entregamos el alma y el corazón, nos creamos un mundo lleno de felicidad y magia, pero por estar en nuestro “mundo”, no nos preguntamos o no sabemos si en realidad la persona a la que amamos tanto nos corresponderá de la misma manera.
El amor siempre tocará a tu puerta y debes darle la oportunidad de entrar.