Hoy mi Sol me preguntó:
- ¿Qué color te gusta más?
- El color del amor... dije yo...
- ¿y qué color es ese?
¿Blanco?, ¿rosa?, ¿violeta?
- El color de la ilusión... dije yo.
- ¿y de qué color es la ilusión?
¿Rojo?, ¿amarillo?, ¿celeste?
- ¡Color blanco piel! - se me ocurrió.
Y mi Sol quedó confuso,
con la respuesta que le di,
es que, todo para mí,
tiene el color de tu piel...
Y yo seguí respondiendo
que el color que más me gusta,
son los tonos diferentes
y sensuales del amor,
matizados con los brillos
que le pinta la ilusión,
con destellos de arco iris,
como siempre digo yo...
Un arco iris majestuoso,
¡que es el puente hacia tu amor!
Y mi Sol quedó tranquilo,
porque al rato me entendió.
Elsa Fariña
26-09-03