Tantas veces mi cuerpo recorriste y besaste,
tantas veces mi piel acariciaste y
mi cuerpo en tus manos tuviste,
recorriste tantas veces una y otra vez,
todas las facciones de mi cara con tus labios,
tantas horas mi cuerpo desnudo,
que hasta estudiaste todos mis pliegues,
cuantas noches te reclinaste sobre mis pechos,
descansaste tu cansancio en ellos y rozaste tus labios,
en ellos que hasta las horas se pasaban sin sentir.
Cada noche en la soledad de nuestra habitación,
en nuestro lecho de amor unimos nuestros cuerpos y
nuestro amor, siento tu cuerpo rozar el mío y
tu piel se excita y desprende un característico y
delicioso perfume aromático de almizclé,
que rezuma todo tu cuerpo y los poros de tu piel,
desprende y se mezcla con un dulce perfume,
a rosas y jazmines que se mezclan con el sudor,
de nuestros cuerpos excitados al hacer el amor,
nuestros cuerpos unidos se funden en uno,
firmando el pacto de alianza de nuestro amor.
Tu cuerpo que ahora lo he poseído con pasión, haciendo el amor, ahora me parece más hermoso, después de tenerte sobre mi cuerpo desnudo.
Te siento más mía que nunca lo había sentido y tan vulnerable a mis besos, a mis caricias y mis juegos,
sin embargo sólo quiero poseerte y tenerte para amarte.
Nuestros cuerpos siguen húmedos, pero juntos y desnudos,
en el ocaso de la noche en nuestra habitación,
nos entregamos los dos el alma, el cuerpo y el amor.
No digas que no escuchas un dulce canto melodioso,
son los latidos de mi corazón que se acelera,
cuando te ve y que pareces descender del cielo,
no desciendes de los tranquilos cielos amor mío,
desciendes de los más bellos edenes y mas anhelados,
que brotan de los sentimientos más profundos de mi corazón,
que me gritan que te ame con locura y amor,
sabes que por siempre te he amado con pasión y
que es tuyo mi corazón mientras vivas a mi lado.