Que de extrañarte me duelen hasta los huesos,
hasta los finos tejidos que alguna vez protegiste,
que de extrañarte, pierdo la batalla y tal vez por eso
me remito a resistir, por aquellas cosas que me diste,
que de extrañarte, la parábola de lo equidistante
somete a mi cuerpo en la divina providencia,
con la palidez, de aquel que fue en un instante,
tu seguidor mas fiel, tu sombra, tu presencia,
y que de extrañarte me mancillan los recuerdos
las ganas de tenerte entre mi alma dormida,
sabiéndote tan cerca, que hasta tus labios muerdo
con el ansia del amante que te entrega hasta la vida,
que de extrañarte, me pesan los años en tu vientre,
teniéndote tan a mi lado, que despegarte no podría,
sumido en tus noches, de delirio y de muerte
sino no eres tú amor quien otra... lo entendería!
"...pienso en vos..."