No entierres tus brazos llegando a mi pecho,
no arranques los ojos al tiempo alejado,
no antojéis en vano el olvido incesante
recorriendo las siluetas de tus caderas,
no insistas ausencia en tus manos suaves,
no soples mi sangre ya seca de corazón.
No ahogues colmada y precavida
tus labios bermejos ardiendo,
no escondas las caderas, no tu encanto,
no cariño, no escondas tu encanto…
como sombra en el silencio mas profundo.
No alejes tu piel de la mía,
no os digáis a tus queridos
que todo beso en tus labios
son de arena muerta…
y que en ellos…
también los míos han muerto.
VERSOS HUMANOS
EstertoR de AmoR
Marzo - 2007