Le pedí a mis ojos que no te vean,
mas groseramente burlan mi petición,
Le pedí a mis labios que no te besaran más
pero se rehúsan a no volver a tocar los tuyos,
Le pedí a mis orejas que no escuchen tu voz de niña otra vez
pero lo que no escucharon fue mi pedido precisamente,
Le pedí a mi nariz que no oliera más tu aroma dulce, aquella nuca
para qué? . si se muere por olfatear la fragancia de tu cuerpo,
Pedir a mis manos que no deseen tocar todo tu cuerpo
es tan difícil . tan difícil,
Y peor aún . pedirle a mi mente que no piense en ti,
y a mi corazón que no te ame, es más que imposible, es utopía, tu luz en mi es tan brillante y cálida como la que el sol nos regala, porque tu luz morirá el día que el sol se apague,
porque el amor sincero que siento por ti
se apagará el día que yo muera,
y si existe amor después de la vida, entonces será una luz eterna.