En el silencio de mis labios
dos palabras para ti mi corazón guarda
como el suspiro preso de unos versos lejanos
que las manos del Amor escriben por la mañana
y frente a mi te contemplo
me embelesa tu mirada
tan clara tan angelada
que desnuda mi cuerpo y acaricia mi alma.
No estás aquí y aún así a mi lado te siento
tocas mi piel con tus dedos de viento,
beso tus labios, tu frente y tus cabellos,
recorro los caminos de sueños y recuerdos,
me abrazas fuerte contra tu pecho,
si supieras cuanto Te Amo, te extraño y te deseo;
mis ojos se nublan como los de un ciego,
en medio de lágrimas y sonrisas te veo
como el alba que las fuerzas de la penumbra arrebata
y despeja las nubes que el cielo opacan;
lo sé, es sólo un sueño, sólo un sueño puede ser
porque ahora despierto y la noche está por caer;
lo sé, es sólo un sueño, sólo un sueño puede ser.
Carlos Manuel