A través de mi ventana,
el reflejo de un sueño lejano,
en mi piel cálida y suave,
siento nieve húmeda,
con luz de luna azul.
.
Nieve lejana del dorado sol,
lejos del mar,
hechizo de luna y copos de azúcar,
muñecos de nieve,
sones de panderetas,
bolas arrojadas entre risas
reflejo del sueño de mi ventana,
aroma de leñas quemadas,
me acariciaban.
Me sentía envuelta en tu mundo,
bañada de luz de luna,
los ecos de la noche,
como sinfonía de belleza infinita,
percibía que mi alma,
se llenaba de serenidad y paz
y me sentí en comunión,
con lo que estaba viendo y soñando.
Quimera de paz
que en la quietud se reflejaban
sin poderse realizar,
con el blanco inmaculado.
Cuando te ame
pensaba siempre en la nieve,
lagrimas de sentimientos,
quedaron atrapada,
en otro espacio,
en otro tiempo.
Despierto al calor de mi isla,
solo era un sueño lejano,
y van cayendo en el alma,
los copos derretidos.
En mis manos,
la flor del recuerdo
huella de lo vivido,
en el silencio blanco,
a la luz de un sueño.