Hazte de mí y pierde cuidado
De la gente que nos saldrá al paso
De los que viven la vida desconfiando
Muriendo sin detenerse a querer un rato
Caminando inconscientemente
Con premura y sin reparo
Hazme de ti con la alegría del trinar de algún pájaro
Así cual brisa suave, que sin querer roza mi cuerpo
O cual el agri-dulce calor
De quien llora si siente amor
O de quien aun durmiendo está despierto
O como aquel enamorado poeta
Que no acaba un verso, que se calla la saeta
Que está soñando y nunca tiene prisa
Y sin cuidado de quien lo mira
Vive con el pecho al aire, sin afeites y sin camisa
Hazte de mí,que soy difícil, cual onírica marinera
Cual paloma o gaviota en raudo vuelo
De mi, que quiero ser de ti el fuego
Que tus ansias calme en tus noches de desvelo
Vamos se valiente y hazme de ti
Cuando ruede yo hecha pedazos por el suelo
Cuando apagando las luces de pasión muera
Ámame cuando siendo cual niña, llorar quiera
Escondida en tus brazos
Amame aun si exhausta
quede yo dormida en tu regazo
Sabiendo esto, ven, no temas,
Acércate a mi vera
Ámame así, como si fuera yo tu primavera
Hazte de mí, sin condiciones
Completamente mío hasta morir
Hazme de ti sin enojos y sin temores
Sin reclamos, sin objeciones
Sin dudas, sin dilaciones
Sin espantos y sin retrasos
Como perdiendo la cordura a cada paso
Se mío hasta perder del tiempo el sentido
Yo enredada en tu cuerpo, tu navegando en el mío
Explorando helechos sin prisas, al libre albedrío
Oyendo de mis caracolas los suspiros
Al Navegar al golpe de tu timón bien dirigido
Amémonos así como al descuido, como ensayando
Un poquito despiertos, otro rato soñando
Haciéndome de ti, así, entregándote enamorado
Cuando nos estemos amando
Querida amiga: !Bello!!!! Un poema de entrega total... No eres una Orinica Marinera...!Eres la Capitana del Navio del Amor mas grande existente!. Que bien que regresas a Rincon con tanto brio y con el mismo talento. Diez de mi parte y de parte de mi hermna que tambien disfruto tu poesia... Te quiero. Ivette Rosario.