En el fragmento de la noche
con la visión desfallecida,
volcando en letras,
lo que mi mente dicta.
En el pensamiento
restalla una melodía
que engendra con luces,
mi sentimiento.
Pleno alegría, tristeza, y goce,
mi mano golpea el teclado,
que suena en la noche
como pasos agigantados.
Y se pierden en laberintos
amando, soñando, viviendo,
sobre el poema naciendo
tomando fuerte vigor.
Con luz propia,
expresando sentimientos de vida,
unidas o ajenas a la mías
están naciendo poesías.
Silencio. Como canto de sirenas,
manifiesta que afloró un repique
de lejanas campanas,
justo al nacer el día.
Y el teclado silencioso quedó
ya plasmados los versos míos,
satisfecha queda mi alma
volcando mi sentir en palabras.