Tú fuiste para mi muy importante,
Para poder vivir feliz,
Para estar bien fuiste motivo incesante,
Todo te lo debía a ti, eso creí.
Tú fuiste mi primavera en el invierno
A pesar de los besos tan escasos,
Y te volviste en su tiempo el infierno,
El motivo de mis triunfos y fracasos.
Tú fuiste el amor que no conocía,
La espinita que me sangra el alma,
La sonrisa que tristeza escondía,
Al saber que había otro en tu cama.
Tú fuiste, no lo niego, el amor,
En mis brazos jamás te derretías,
Y tus labios que guardaban el sabor,
Que denotaba que a otro ya pertenecías.
Tú Fuiste todo, por eso hoy te escribo,
Que en mi pecho otro nombre está escrito,
Porqué es ella mi vida y mi motivo,
Aunque por ti si sentí algo bonito.
Y a pesar de la inocencia que tenía,
Yo sabía que te quería demasiado,
Tú fuiste todo y ahora ha cambiado,
Fuiste todo… pero nunca mía.