No seremos más el juguete permanente
De nuestras pasiones, placer pasajero y fugaz.
Cuando sea prudente disfrutaremos más;
gozaremos equilibrio entre placer físico
y gozo verdadero que constante trae paz.
Ese gozo espiritual que sobrepasa todo,
todo entendimiento. Gozo que perdura
que agradablemente nos quema por dentro.
Que desborda los lagos de nuestros ojos
en esos ríos de bálsamo amado y misterioso.
Pródigas lágrimas que los rostros surcan
Y bendicen hasta las comisuras de los labios.
Con dulzura saboreamos la sal de nuestro llanto,
llanto tierno que nos eleva el alma.
Nos deja exhaustos pero llenos de paz.
Paz que perdura y aligera nuestras cargas.
A Ti nos acerca y nuestro intelecto ilumina.
Una de las dichas mágicas más sublimes
que puede experimentar el ser mortal,
es la dicha de estar sensible y consciente,
seguro, cabal , sin duda del ser espiritual.
Sentir que el mora en el estuche temporal;
joya preciosa muchas veces ignorada,
tantas otras olvidada y descuidada.
Reconocer que somos mucho más que cuerpo.
Poder percibir y cuidar esa liana poderosa
y delicada que permanece extendida,
suspendida, desde nuestra alma preciosa
hasta la eternidad con el Padre conectada.
Por instantes maravillosos de gozar así
vale la pena cualquier prueba que haya,
cualquier dolor que se tenga que sufrir.
La vida es compleja, buena, difícil y bella.
Gozarla y sufrirla emocionados es vivir…
Que las dejara ser plasmadas en papel…
Las ideas las que siempre han estado allí,
muy ordenadas ahora, ya se van a dormir….
West jordan, Abril 6, 2006
3:00 a.m.