Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo,
y diente por diente. Pero yo os
digo: No resistáis al que es malo;
antes, a cualquiera que te hiera
en la mejilla derecha, vuélvele
también la otra; y al que quiera
ponerte a pleito y quitarte la
túnica, déjale también la capa;
y a cualquiera que te obligue a
llevar carga por una milla,
ve con el dos.
Al que te pida, dale; y al que quiera
tomar de ti prestado, no se lo rehúses.
Oísteis que fue dicho: Amarás a tu
prójimo, y aborrecerás a tu enemigo.
Pero yo os digo: Amad a vuestros
enemigos, bendecid a los que os
maldicen, haced bien a los que os
aborrecen, y orad por los que os
ultrajan y os persiguen; para que
seáis hijos de vuestro Padre que
está en los cielos, que hace
salir su sol sobre malos y buenos,
y hace llover sobre justos e injustos.
Porque si amáis a los que os aman,
¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen
también lo mismo los publicanos?
Y si saludáis a vuestros hermanos
solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No
hacen también así los gentiles?
Sed, pues, vosotros perfectos,
como vuestro Padre que está
en los cielos es perfecto. MATEO 5:38-48