Perdóname, si te estoy olvidando,
si ya no escucho tu sonrisa flotando.
Perdóname, se desvanece tu cara
y voy a buscarla en un viejo retrato.
Tu voz en un eco se va apagando,
no extraño ya tus delicadas caricias,
se han disipado aquellas delicias.
Indúltame, si en otro estoy pensando
y en el aire un amante voy dibujando.
Te recuerdo y en mi pecho te guardo.
Gracias por haberme amado tanto,
por hacer de mi vida un dulce encanto.
Perdóname, ya te estoy olvidando.
Te fuiste porque estabas cansado
me dejaste sola, dolida y llorando.
Celé a la muerte porque la abrazaste
con esos tus brazos que eran tan míos.
No pude seguirte, ni puedo esperarte.
Ya no quiero estar sola. Lo siento.
Mi boca dulces besos implora
y en sueños proclamo una aurora.
Mi corazón, de ti, está exento…
Aunque te ame hasta mi último aliento.
Estela Foderé