PREGUNTÁNDOLE A LA LUNA

PREGUNTÁNDOLE A LA LUNA

Fuiste agua que lavó mi soledad,
el calor que evaporó, el frío de mi alma,
la gracia que fermentó, la semilla de mi rosa,
esta que adornará . . . . la tibieza de tu alcoba.

Mis palabras han logrado fluir,
tejiendo rimas que logran decir,
que de aquí al infinito, eres mi razón de ser,
acrecentando inexplicable, mis bríos y mi fe.

Mi piel a presentido, cada uno de tus deseos,
a mi pecho le has arrancado, millares de suspiros,
al corazón le armonizaste sus disparatados latidos,
mi retina te ha dibujado cual si fueses espejismos.

Le he preguntado a la luna arcana,
ella que tiene la dicha, de entrar por tu ventana,
que le pregunte a tu inconsciente; cuando duermes,
los secretos de tu corazón o si algo por mí aún sientes.

José Estrada