Joya amada de mi tierra, eres brisa perfumada,
donde encierra leyenda tu humilde corazón.
Estrella de la dicha claridad de madrugada,
en tu ventana en mi canto, te traigo un pendón.
Ninfa blanca flor vendita capullo de azahar,
perdón niña bonita, si te pido dejar tu sueño,
pero sabiendo de tu candor haces tantos desear
al trovero, que anhela de tu amor ser el dueño.
Arrullo al corazón son tus palabras dulces,
armónicamente apaciguan a los sentidos
oírte hablar, cesación extraña en mí induces,
glorifica todo mi ser y aceleran mis latidos.
Feliz soy al escuchar tu voz infanta celestial,
ahora todos mis caminos, serán bellos senderos.
Recuerdas niña mía que mí tienes un sitial,
donde sabré amarte con amor real y austero.
Autor: Alcibíades Noceda Medina