Recorro aquellas huellas que un día quedaron marcadas en nuestro diario caminar por la vida.
Vivimos una historia de amor, única, insuperable, tierna y a la vez pasional.
Esos momentos irrepetibles, llenos de amor, llenos de sentimientos vienen a mí, los cuales no quisiera borrarlos jamás, pero tendré que dejarlos partir junto a ti.
Los besos tiernos que sedienta los aceptaba, me transportaban a esa felicidad que le dio vida a mi existir, y hoy te los llevaras.
Recorro aquellas calles buscándote, pero se hizo tarde, no logro verte, tu silueta ya se esfumo entre la densa neblina que cubre el riachuelo.
De pronto el cielo se cerro, la luna se escondió, las estrellas opacaron su brillo.
Deje de buscarte, entre lágrimas y sin querer recordar el pasado, dejas de existir en mi vida, te esfumas entre la densa neblina que cubre al riachuelo, yo me quedo, pero no esperando tu regreso, sino dejando escapar mi pasado, para empezar a vivir mi presente.