Amor, quisiera regalarte
de mi jardín, la mejor de mis rosas,
de un color púrpura como la sangre,
que fluye con fuerzas , cuando estás conmigo.
Una rosa que lleve mi fragancia,
que te embriague, te maree, que te excite,
te obligue a buscarme sin sosiego,
para poder entregarme lo que sientes.
Que brille, por ser única en su especie,
que no tenga en su tallo espina alguna,
bordada por mil gotas de rocío,
y néctares que fluyan a su antojo.
Que acaricie tu imagen adorada
el suave terciopelo de sus pétalos,
y su cáliz te grite lo que ansío,
cuando como esa bella flor, me rindo…
® Susana Valenzuela
18-02-10