Y me envolvio el silencio
y el brillo se apago,
era una tarde hermosa
cuando entristecia por no verte mas.
El sol se ocultaba lento
entre esas lejanas montañas,
y en tanto en mi pensamiento
te aparecias una y otra vez.
No pude contenerme
se me escapo una lagrima,
y en un profundo suspiro
tu nombre con mi voz
se llevo lento el viento.
No quiero mas pensarte,
cuantos lugares!, cuantos caminos!,
que me hacen querer encontrarte,
aunque ese encuentro sea
solo aqui en mi pensamiento.
Lo que me queda de ti es tan poco
pero tambien es lo suficiente,
para querer arrancarte
aun sin dejar de pensarte.