Su voz de ave, es un canto al amor,
en ella se encuentra arrullo suave,
melodiosamente llega y conmueve,
es dulce al oído, no hay nada mejor.
Hasta cuando camina enamora,
en realidad parece que se desliza,
al andar su cuerpo se armoniza
cadenciosamente, todo es ternura.
Son mansos lagos azules, sus bellos ojos,
alegra su rostro, que no sabe de tristeza.
Mejillas sonrosada, naturalmente matiza
como si fuera pintada, hecha a los antojos.
Rizos rebeldes, juegan con el viento,
y provoca aun mas, al amor sediento.