Pienso en tí cuando la brisa me toca.
Pienso en tí cuando la noche llega.
Pienso en tí cuando larga es la espera.
Pienso en tí cuando otros labios me besan.
Si encontrarte quisiera, de inmediato lo haría,
yo se que tus sentimientos, son míos todavía.
Pero no vale la pena, prolongar la agonía,
de vivir en la incertidumbre, compréndelo vida mía.
Y aunque el amor permanezca
y el deseo sea imponente,
no hay razones suficientes,
para que este amor crezca.
Por eso yo reafirmo,
con dolor profundo en el alma,
que pase, lo que pase,
no hay nada más importante,
que mantener la calma.