Desde niño galopé a rienda suelta,
de mis verdades es testigo el viento,
verasidad responde a lo que cuento.
Sé mas de cuita, qué vida opulenta.
Lo que he hecho ahora heroico resulta;
siendo niño, atareé y no me arrepiento,
a mis hermanos mas chicos sustento
he conseguido, pero; sin darme cuenta.
Volé por mi destino mas adelante,
fui hacedor del mismo, vagué errante
feliz los días, cual cigarra cantando.
Ni del más fiero dolor no me lamento,
cicatriz mis manos llenó por alimento.
Desde la madruga aun sigo trotando.
Autor: Alcibíades Noceda Medina