Todo esto que ahora soy
es lo que he hecho yo mismo
con mi mente, con mi cuerpo,
con mi vida y con mi tiempo,
hasta llegar a donde estoy.
Lo que hoy estoy viendo aquí,
frente a frente, en el espejo,
un poco más sabio y viejo
que el que en otros tiempos fui,
es la suma de momentos,
experiencias y emociones,
éxitos y decepciones
que me han dejado los años,
producto de mis aciertos
y también de mis errores,
a medida que he vivido
y, al vivir, he recorrido
la ruta de mi existencia.
Aprendí a tener paciencia
y a perdonar los agravios,
a ser más justo y prudente,
más cauto y condescendiente;
ahora que surcan mi frente
las huellas de mis tropiezos,
ahora que muestran mis canas
que no basta "echarle ganas"
y que también es preciso
andar con el paso recto
en el sendero de la vida
(y con el ánimo despierto).
Todo esto que ahora soy
y contemplo en el espejo,
me indica hacia donde voy
y el lugar en el que estoy
en un camino ya viejo
andado por tantos otros,
que aún me tiene perplejo.-
Eduardo Ritter Bonilla.