¿En qué lugar? ¿Dónde? ¿A qué deshoras me
amarás?
Cabalgando en tus deseos como esclava de tus noches.
La eternidad apremia…
Cambias la dimensión del universo…
Dicha.
Tormento.
Y yo, despoblada de mí,
poblada de ti
interrogando mi cuerpo
sobre el enigma de tu piel.
Desierto
que florece en primavera.
Y regreso a tus manos…
descalza, subversiva ,
a mordiscos te traigo hacia la noche
aún fantasma…
y te hago el amor
sobre una hoja en blanco …
Ay!
Confundes mis sentidos con el suspiro de tus sueños
y me coronas como tu única reina.
La noche se hace vértigo,
acantilado,
frontera a mi locura,
profundo abismo.
Se duerme convexa sobre el sueño,
que te sueña cuenco,
vibrando…
palpitando…
temblando…
cóncavo en mi cuerpo…