No me hagas una descripción,
deja vivir ya mi corazón.
Sólo fue tuyo el error
de marcharte con otra peor.
Por eso tengo que desearte suerte,
yo ya no puedo tenerte.
Tu caíste en la tentación
ahora no vuelvas rogando perdón.
Por favor, no me pises más,
yo ya no puedo aguantarlo más.
Como cual roamano lo hiciste:
viniste, me viste y venciste.
Ya no vuelvas en la noche,
ya no vuelvas en el día,
no quiero tus reproches
de lo mucho que yo te quería.
No puedo darte otra oportunidad
se perdió mi perdón y tu sinceridad.
Me cansé por fin de llorar
todas las lágimas que sobran en el mar.
Fui víctima de tu seducción
como lamento esa situación.
Cayendo en tus garras presentía
que no eras buena compañía.
No reclames como tuyo mi corazón
y no me cantes la misma canción.
Se enciende una luz en la oscuridad,
tu y yo tenemos por fin libertad.
Ya no vuelvas en la noche,
ya no vuelvas en el día,
no quiero tus reproches
de lo mucho que yo te quería.